lunes, 30 de julio de 2012

Souvenirs de Tokyo

Los viajeros de verdad van ligeros de equipaje, así que yo procuro imitarlos y me he dado cuenta de que cada vez necesito menos cosas. Es más, no sólo meto poca ropa en la maleta, si no que a la vuelta también prefiero traerme experiencias antes que un montón de cachivaches que se llenarán de polvo en las estanterías.
Pero algún recuerdo de Tokyo, sí que me he traído ¿queréis verlos?
Parejita de toys, Geisha Minnie y Matsuri Mickey; los compré en el Disney Store de Shibuya y me va a dar mucha pena sacarlos  de la caja.
Camiseta de Lulu Guinness para Uniqlo. Tadashi Yanai es la versión japonesa de Amancio Ortega y en los últimos años ha abierto tiendas de su buque insignia, Uniqlo, por todo el mundo. Es una pena que aún no la tengamos en España porque siempre se encuentra algún básico interesante.

Cada vez que me ponga esta camiseta me acordaré del protocolo al que me sometieron en el probador de la tienda: tuve que quitarme los zapatos, cubrirme el pelo y la cara con una bolsa de papel... cualquiera diría que venía directa de Fukushima. En fin, no hay que olvidar que esto es Japón, la asepsia es el deporte nacional.
 
El libro de Daido Moriyama no es mío, como ya habreis adivinado esto es cosa del fotógrafo.
Yo apenas conocía de nombre a Moriyama, pero allí es Dios. De tanto verlas, he llegado a cogerle el punto a sus imágenes desenfocadas. En España sus libros son escasos y caros, así que había que aprovechar.
Para los frikis de la papelería como yo Tokyo está lleno de tentaciones. Descubrí estos cuadernos en la librería Tsutaya de Roppongi Hills y por poco acabo con todas las existencias, están a medio camino entre un cuaderno de caligrafía Rubio y un libro de cuentas antiguo, sencillamente perfectos.
Aunque tengo mi colección más descuidada de lo que quisiera, siempre compro sellos. Éstos conmemoran el aniversario de los museos nacionales de Arte Moderno de Tokyo y Kioto.
He dejado mi favorito para el final, es algo que rescaté de una especie de Feria del libro de ocasión que me encontré un buen dia montada en la estación de Shinjuku.
Se trata de un programa de mano de la película Annie Hall, original de 1977, con un montón de fotos de la peli en el interior y un montón de textos que no entiendo porque están en japonés.
Mis otros recuerdos de Japón, los que de verdad importan, podréis verlos en el blog semana a semana. Aquí os espero.

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